Cómo crear y conservar tus propias genéticas de cannabis

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Cómo crear y conservar tus propias genéticas de cannabis

La mayoría de las preciosas variedades de cannabis de hoy en día fueron descubiertas y desarrolladas por cultivadores domésticos normales y corrientes. Parte de la marihuana más selecta del mercado en estos momentos es producto de pequeños proyectos de cría clandestina. ¡Aquí te explicamos cómo empezar el tuyo!

VÍA LIBRE PARA LA CREATIVIDAD

Antes de que puedas embarcarte en un proyecto de cría casera, primero debes tener claros tus objetivos, tus recursos y el espacio del que dispones para cultivar. Tendrás que invertir en tierra, mano de obra y capital para lograr tus objetivos. No hay trucos ni atajos cuando se trata de crear una nueva variedad de cannabis única. Prepárate para establecer y mantener un programa de cría a medio y largo plazo. Si tienes la intención de seguir cultivando un cultivo personal o comercial de sinsemilla, serán necesarios múltiples espacios de cultivo en cuarentena. Normalmente, un mínimo de tres cuartos de cultivo son esenciales. Lo ideal sería un cuarto de cultivo grande para florecer grupos de semillas, un segundo armario de cultivo para albergar plantas madres y/o enraizar esquejes, y una tercera cámara sellada con machos para cruzar.

¿QUÉ BUSCAS EN UNA CEPA?

Saca esquejes de las hembras más privilegiadas de tu cultivo de cannabis o consigue más semillas feminizadas/autoflorecientes de tus variedades favoritas. Primero debes identificar claramente todas las características que te gustaría tener en tus nuevas variedades de marihuana. Y debes ser consciente de los atributos que quieres conservar. Así es como idearás la receta para tu variedad de cannabis exclusiva. ¿No estás seguro de por dónde empezar? Las siguientes 5 cualidades son la columna vertebral de los programas de cultivo de cannabis más exitosos.

LOS 5 RASGOS DEL CANNABIS DE PRIMERA CALIDAD

Solo se puede descubrir qué rasgos están aportando las plantas masculinas, ya sean dominantes o recesivas, cultivando su descendencia. No hay otra manera de saberlo. Por lo tanto, asegúrate de mantener los machos separados de las hembras para evitar la polinización accidental.

POTENCIA

Obviamente, fumar una simple prueba confirmará la calidad de tu producto. Durante mucho tiempo, los cultivadores se obsesionaron con los niveles de THC más altos posibles. Ahora las cosas han cambiado. Si eres un cultivador de cannabis medicinal, probablemente te interese concentrarte más en el contenido de CDB y lograr el equilibrio adecuado entre THC y CDB. Pero tampoco hay que descartar los clásicos índica dominantes como la Northern Lights XL o las sativas cerebrales como la Amnesia Haze XL.

Por supuesto, el alto contenido de THC sigue siendo muy deseable, especialmente para los consumidores recreativos. Pero si empiezas con la materia prima verde y pegajosa correcta, no es tan complicado. Por ejemplo, en un cruce de genéticas con más de un 20% de THC, como la Choco Candy (21% de THC) sativa dominante o la Crazy Cookies (24% de THC) con predominancia índica, es probable que la planta resultante sea básicamente brutal, y lo más seguro es que también increíblemente sabrosa. No te olvides del "efecto séquito". Los cannabinoides, los terpenos y los flavonoides interactúan entre sí para aumentar el efecto general de la marihuana.

PRODUCCIÓN

Altas proporciones de flor respecto a hoja y una gran productividad siempre son cualidades valiosas para una variedad. Para muchos microcultivadores y pequeños productores, esta es la característica más apreciada. La Critical XXL es una fábrica de cogollos orgánica. Además, como híbrido Skunk vigoroso, es muy estable y fácil de clonar. Tener por lo menos un padre potente en la mezcla ayuda, aunque solo sea para aumentar las probabilidades de encontrar fenotipos especiales entre la descendencia.

FRAGANCIA

Las cualidades aromáticas siempre son importantes. Aunque también una variable real. Algunos criadores quieren cepas discretas con poco olor, otros buscan cítricos picantes y aromas dulces y afrutados, mientras otros adoran el almizcle aún más fuerte e intenso. Independientemente del aroma que prefieras, es mejor que te asegures de tener filtros de carbón limpios y un excelente sistema de filtración de aire. Incluso la cría de pequeños lotes de 10-20 semillas a la vez generará un fuerte olor a marihuana. Elige las cepas madre con mucho cuidado y guarda muchas muestras de cogollos curados para evaluar el aroma completamente desarrollado. No podemos resistirnos a recomendar las Blueberry y la White Cheese Fast Flowering por sus encantadores combinaciones de aromas.

Cómo crear y conservar tus propias genéticas de cannabis

PERFIL AROMÁTICO

En realidad esto es una cuestión de gustos. ¿Disfrutas de una calada suave de marihuana de la vieja escuela? ¿O con el cannabis dulce como un postre? Existe una enorme diversidad en el perfil de sabor de las variedades de cannabis contemporáneas. Piensa en Pineapple Express, Vanilla Ice y OG Bubble Gum como base de partida inicial y candidatas muy interesantes como madres.

APARIENCIA DEL PRODUCTO FINAL

Tómate 5 minutos para hacer una búsqueda rápida en Google de genéticas premiadas en las High Times Cannabis Cups de finales de los años 70. Exacto, parece muy cutre. Hoy en día, los cogollos densos y recubiertos de azúcar están a la orden del día. El atractivo del producto final es generalmente el aspecto en el que los proyectos de cría casera se suelen quedar cortos. Puede haber variaciones entre las formaciones florales en distintas plantas del mismo grupo. Algunos rasgos recesivos de cogollos sueltos y frondosos todavía pueden estar presentes incluso en las variedades de cannabis modernas. La Skunk es el híbrido que estableció el estándar del aspecto que debe tener un cruce de máxima calidad.

¿CUÁL ES LA ESTRATEGIA DE CRÍA ADECUADA PARA TI?

HÍBRIDOS F1

Los híbridos F1 son más homogéneos, crecen más vigorosamente y suelen superar a sus padres en el cuarto de cultivo. La combinación de dos cepas estabilizadas y no relacionadas genéticamente es la única manera de crear auténticas semillas F1. Si quieres crear un híbrido genial como la Power Kush, tendrás que cruzar ejemplares de la Critical y OG Kush de pedigrí. Esto es lo más cercano a una apuesta segura que conseguirás en la cría de cannabis. Solo hay un paso. Cruza dos padres estables pero diferentes, y la descendencia serán híbridos F1.

CRUCES POSTERIORES

Si cruzas la misma descendencia F1, obtendrás híbridos F2. Y aquí es donde el tema se complica. Los F2 serán mucho menos uniformes que los F1, y mostrarán una serie de fenotipos distintos. El cruce de hermanos es más complicado. No es imposible, pero tardarás muchas generaciones de cuidadosa selección de fenotipos en lograr la estabilidad deseada.

RETROCRUZAMIENTO

El retrocruzamiento es quizás la mejor estrategia para un programa de cría a pequeña escala. Si conservas una planta madre de uno de los padres o sigues una línea de esquejes, esta es una opción viable. Primero, cruzas ambas cepas parentales. A continuación, se cultiva un grupo de esa descendencia y se retrocruzan con la planta madre original. Normalmente, la siguiente generación retrocruzada tendrá que retrocruzarse de nuevo con la línea materna y tal vez también una generación más, para poder fijar los rasgos deseados.