¿Tu hierba está demasiado seca? ¡Rehidrátala!

REHIDRATA TU HIERBA

Cuando el cannabis se seca demasiado, desarrolla algunas características no deseadas. Se vuelve difícil de fumar, se quema demasiado rápido y pierde potencia debido a que las temperaturas de combustión son demasiado altas y el THC se evapora antes de llegar a los pulmones. También se pierden terpenos, por lo tanto, cambian los sabores y los aromas. Además, se deshace en pedazos y es difícil de manejar.

Antes de que sumerjas tu marihuana en agua o la mojes con un pulverizador, plantéate estos métodos probados para rehidratar tu cannabis reseco.

Por supuesto, prevenir es mejor que curar. Lo mejor que puedes hacer es evitar que tus cogollos se sequen demasiado.

ALMACENAMIENTO HERMÉTICO Y AL ABRIGO DE LA LUZ

La humedad relativa (HR) ideal para el cannabis seco es de 55-65%. El aire y los rayos de luz UV son malos para tu hierba cuando ya está curada. Por lo general, el aire extrae la humedad de los cogollos y los seca demasiado. Aunque también puede suceder lo opuesto; en climas muy húmedos, el aire hace que se pudran. Los rayos de luz UV degradan el THC y reducen la potencia de la hierba. Como es el caso con la mayoría de los alimentos, almacenar marihuana en un lugar fresco y oscuro conservará mejor su calidad.

Si tuviste una buena cosecha o compraste mucha hierba, es buena idea racionar los cogollos para no exponerlos al aire cada vez que abras el frasco. Separa lo que consumirás en el día y guárdalo en un frasco más pequeño o cualquiera de los método para guardar cannabis disponibles en el mercado. Esto reduce tus visitas a tu reserva personal a una por día. La exposición frecuente al aire es la manera más rápida de resecar tus cogollos.

VIDRIO SÍ, PLÁSTICO NO

El método preferido para almacenar cannabis curado es en frascos de vidrio de boca ancha. Los hay de distintos tamaños, son herméticos y tienen una abertura grande para poder meter la mano. El vidrio es mejor que el plástico porque no hace que el contenido pierda humedad, es inerte, fácil de limpiar y estéril.

Los envases de plástico funcionan bien, pero son de plástico y contaminan el planeta. Existen varios sistemas de almacenamiento de buena calidad para cannabis. Compra uno que te dure para toda la vida.

REHIDRATAR TU CANNABIS ES FÁCIL

Si olvidaste cerrar el frasco de tus reservas durante una noche, encontraste material olvidado o simplemente compraste cogollos un poco resecos, está bien; es fácil rehidratar el cannabis. Solo necesitas paciencia y saber cómo hacerlo para lograrlo. Seguramente se hayan perdido algunos terpenos, pero es probable que la potencia no se haya visto demasiado afectada. A menos que hayas dejado tu hierba al sol en el salpicadero del coche, la mayoría de los aromas se pueden recuperar y el THC no se habrá degradado demasiado.

AGUA DESTILADA

El agua destilada es agua que se evapora y se vuelve a condensar. Este proceso elimina impurezas y compuestos químicos, por lo que el resultado es H₂O pura. Puedes usar agua del grifo si estás seguro de su calidad, en especial si está libre de cloro y fluoruro.

Necesitarás un recipiente con tapa suficientemente grande para colocar tu bolsa/frasco/botella y una servilleta de papel doblada.

Humedece lentamente una servilleta de papel con agua. No debe quedar empapada, solo humedecida y doblada suavemente. Coloca la servilleta dentro del recipiente grande con tu hierba, que estará dentro de tu bolsa/frasco/botella.

Coloca la tapa del recipiente grande y déjalo reposar 2-12 horas. El tiempo dependerá de lo resecos que estén los cogollos, pero espera al menos 2 horas antes de volver a abrir el recipiente.

CÁSCARAS

Las pieles de las frutas son una fuente accesible de humedad que se libera lentamente. Algunas cáscaras de hortalizas también funcionan, pero no las que se convierten en un puré, como las del pepino o la calabaza. Las cáscaras de cítricos son ideales y las de patata también sirven. Ambas liberan lentamente la humedad, a una velocidad similar a la velocidad de absorción de humedad de la marihuana seca.

Coloca tu hierba en su envase dentro de un recipiente más grande junto con algunas cáscaras y coloca la tapa. También puedes perforar la bolsa donde guardas la hierba y colocarla dentro de otra bolsa que contenga las cáscaras. Debes tener cuidado de que las cáscaras no estén en contacto con tus cogollos.

A menos que olvides sacarla, hay pocas probabilidades de que la hierba desarrolle moho o se pudra. Las cáscaras de cítricos repelen a las esporas con su gran contenido de aceites esenciales, y las cáscaras de patata se secan muy rápido.

HUMIDIFICADORES

Los humidificadores son la opción más cara para almacenar cannabis y rehidratar la hierba reseca. Por lo general, son cajas cerradas fabricadas con cedro, que es una madera que repele naturalmente plagas y patógenos. Contienen un higrómetro y un depósito de esponja donde se coloca agua destilada. Siempre que el depósito esté lleno, configurar el higrómetro a una humedad relativa de 55-65% mantendrá tu hierba en las mejores condiciones por tiempo indefinido. Colocar cogollos resecos en un humidificador permite una absorción lenta de la humedad y, posteriormente, una humedad estable.

Otros tipos de humidificadores utilizan una mezcla con propilenglicol para mantener la humedad. Asegúrate de que el ajuste de humedad sea un nivel apto para cannabis. Algunas mezclas sirven para cigarros y rondan el 70%, demasiado para la marihuana. Utiliza la mezcla adecuada para evitar que tu hierba se pudra.

PACKS DE HUMEDAD

Hay varios productos disponibles para regular la humedad. Los más comunes son los packs de humedad, que están fabricados con un material de ósmosis unidireccional. Esto permite que la humedad salga lentamente de la bolsa, pero que la bolsa no la absorba nuevamente. Vienen en varios niveles de humedad aptos para cannabis para adecuarse a diferentes climas.

Las bolsas son suaves y acolchadas, y se vuelven sólidas cuando su contenido de humedad se agota. El tiempo de exposición dependerá de lo secos que estén los cogollos y de cuántos cogollos quieres rehidratar.