Bubblegum 

La Bubblegum es una cepa de cannabis muy famosa y popular; pero está envuelta en ambigüedad y misterio. Se cree que se originó en Indiana, EEUU, a finales de los 70 o principio de los 80, donde circuló durante un tiempo, ganándose una reputación. Entonces se pasó a unos pocos criadores distintos que la trajeron a Holanda en los 90. A partir de ahí su reputación subió como la espuma y se hizo conocida por su sabor intenso a frutas y su subidón eufórico. Desde entonces se han engendrado multitud de vástagos con la esperanza de pasarles las extraordinarias cualidades de la Bubblegum.

Se rumorea que la cepa que llegó primero a Holanda fue el resultado de una cría intensiva de la Bubblegum original con algunas Sativas exóticas no reveladas. Hicieron falta cinco generaciones de esta rigurosa y selectiva cría para concebir lo que se considera como la primera Bubblegum real en llegar al mercado en Holanda. Durante ese tiempo, también ha atravesado un selectivo proceso de cruces para reforzar la cepa y que logre unos resultados fiables y uniformes. Claro que esta información es todo rumor y dicen que no hay pruebas definitivas de cómo se formó la Bubblegum que conocemos y amamos, y de qué se compone su herencia exactamente. Estos son los puntos históricos generalmente aceptados.

Esta cepa es una cepa varias veces galardonada, tan popular que se puede considerar una "familia" de cepas por sí sola. Casi tiene seguidores de culto que ansían las delicias y cualidades que la Bubblegum ofrece. 

Entre sus fumadores, la Bubblegum es conocida por sus únicos y suculentos sabores y su poderoso y eufórico subidón. Aunque es conocida por sus fuertes rasgos Sativa, la Bubblegum también provoca un fuerte colocón corporal. La combinación de un subidón mental con un colocón corporal hace que la Bubblegum sea una opción perfecta para la relajación y el desahogo - ideal para compartir con amigos o a solas en un día de lluvia. Desde una perspectiva médica, la Bubblegum es conocida por reducir el estrés, la ansiedad y el dolor. Es muy potente y puede ayudar fácilmente a adormecer a quienes necesitan un descanso emocional y físico. Una palabra de aviso: ¡la Bubblegum es muy potente! Si la vas a probar por primera vez, asegúrate de tomártelo con calma al principio – oriéntate y acomódate, la Bubblegum puede tener fácilmente un efecto sofá para el imprudente, (¡a menos que sea lo que quieres!).

El sabor y aroma de la Bubblegum pura (y a menudo de sus vástagos) es de fuera de este mundo. Tiene un aroma que sólo puede ser descrito como chicle dulce de la vieja escuela. Del tipo que nos encantaba de niños, de ahí su nombre. Su humo es suave y también tiene un fuerte sabor a chicle con toques terrosos. Es bastante extraordinaria y es fácil de ver por qué tantos la buscan y también a sus híbridos. 

Obviamente, aquí en Zambeza, no seríamos muy inteligentes si no ofreciésemos al menos una variedad con esta estupenda genética, teniendo en cuenta el número de fans que tiene la Bubble Gum, que la adoran (y merecidamente, tenemos que aclarar) por todas sus estupendas cualidades. Estamos orgullosos de contarte, que no sólo tenemos una gran alternativa a tu disposición, con la OG Bubble Gum de Zambeza, sino que también satisfacemos a los amantes de las autoflorecientes con nuestra OG Bubble Gum Autofloreciente.

La OG Bubble Gum de Zambeza, como probablemente te puedas imaginar, es un gran cruce entre Bubble Gum y una OG Kush. Se trata de una combinación que sin duda ofrece lo mejor de ambas variedades, donde el famoso aroma de la Bubble Gum, tan apreciado, se encuentra con los efectos increíblemente relajantes de esta maravilla para el estrés. Algunos dicen, que fumar OG Bubble Gum es como una experiencia culinaria de primer nivel en algún restaurante pijo, ¿y quién no está de acuerdo? ¡Nosotros también lo creemos! Además de su espectacular sabor y una mezcla muy equilibrada entre efectos relajantes y la euforia de la OG Kush, aporta más cualidades al consumidor, como sus cosechas abundantes y un período de floración bastante corto. La OG Bubble Gum Autofloreciente de Zambeza te ofrece todas estas características también, es decir, su dulce sabor a frutas del bosque y sus increíbles efectos, pero en una versión autofloreciente súper rápida

La Bubblegum suele crecer de una de estas dos formas: Como una estructura tipo poste con muy pocas ramas laterales o como un árbol de Navidad con muchas ramas anchas. En el primer caso, se recomienda favorecer una floración temprana a base de la poda, el método de mar de verde es muy conveniente para ello. Si tienen muchas ramas, se debe dejar que madure, aunque tardará más, verás unos mejores resultados en cuanto a la producción. En general, una planta de Bubblegum pura tardará 56-63 días a florecer en el interior y estará lista para mediados-finales de octubre en el exterior. Su cosecha de interior es de unos 300-450g/m2 dependiendo de las condiciones. Es una gran elección para los cultivadores entendidos y se encontrará muy a gusto en una colección especial. En el interior, un entorno de suelo suele ofrecer los mejores resultados.

La Bubblegum posee un hermoso tono verde brillante y se cubre de pelos naranjas a medida que crece. Su gran abundancia de cristales le da el aspecto de estar nevada. Tiene multitud de colas y la estructura de la planta es lo bastante fuerte como para aguantarlas. Es muy agradable de contemplar.

La Bubblegum es una cepa de reyes. Ha ganado dos High Times Cannabis Cup en 1994 y el segundo lugar en  1995 y 1999. Como puedes comprobar, esta cepa tiene mucho que ofrecer. Es bastante difícil de conseguir en su forma pura, pero te recomendamos probar uno de sus vástagos. Aquí en Zambeza nos encanta y siempre nos sorprende con la calidad de su sabor y su subidón, y somos unos entusiastas de su potencial para la cría.  Sus fuertes subidones eufóricos, potente colocón corporal y sabor único, hacen de la Bubblegum una clásica por derecho propio; si aún no lo has hecho, pruébala al menos una vez - lo más probable es que te sumes a su culto.